Uruguay ya cuenta, oficialmente, con nuevo presidente. Este domingo asumió su mandato Tabaré Vázquez, sucesor de José Mujica al frente del país vecino y que en las elecciones pasadas logró el 56,5% de los votos.
En el acto de asunción, Vázquez expresó: «Hace exactamente diez años, desde este mismo lugar me dirigía a la Asamblea General del Poder Legislativo en ocasión de asumir la presidencia de la República Oriental del Uruguay. Hoy la vida me da una segunda oportunidad».
Asimismo, se refirió a la gestión anterior de su copartidario Mujica, de quien aseguró continuará fomentando sus valores, que «serán los referentes axiológicos que inspirarán y animarán las políticas y medidas concretas que desde nuestro Gobierno impulsaremos».
Al respecto de los desafíos que se avecinan, Uruguay consolidó las políticas de inclusión e igualdad en relación al resto de Latinoamérica pero tendrán que trabajar y mucho en la reducción de los índices de criminalidad y robos, en la Economía local deberá reducir el déficit fiscal del 3,3% del Producto Bruto Interno (PBI), inflación del 8% y devaluación de la moneda en 10% anual para ambos rubros, además de poner manos a la obra en el ámbito de la Educación y su infraestructura. Para ello, inmediatamente se comunicó que van a destinar un presupuesto del 6% del PBI.
Se inicia una nueva era, la tercera consecutiva para la izquierda, y con las bases establecidas por un carismático mandatario que no será fácil de olvidar. Comienza un nuevo Uruguay.
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