El rugby se viste de negro

Con la destacada participación de una selección argentina que invita a un futuro promisorio para este deporte y con el gran nivel al que nos tienen habituados equipos como los de Sudáfrica y Australia, el dueño absoluto de la Copa Mundial que culminó en Inglaterra este fin de semana fue Nueva Zelanda.

Los All Blacks despacharon a los Wallabies por 34-17 en una demostración de la superioridad de la selección que viste de negro.

Tres penales y una conversión (posterior al try de Nehe Milner-Skudder en tiempo cumplido del primer periodo) de Dan Carter en el primer tiempo ponían el parcial para los campeones del mundo 16-3 (Bernard Foley había igualado temporalmente el tanteador). Esta parte del juego mostró a un conjunto decidido a dejar todo en cancha para convertirse en el primer país en obtener el bicampeonato consecutivo. Y así lo logró.

Cuando comenzó la etapa complementaria los australianos nivelaron el encuentro, pero los dos tries de David Pocock y Tevita Kuridrani (con sendas conversiones de Foley) apenas sirvieron para ilusionar con una remontada que sepultó Carter cuando en una milésima de segundo decidió anotar mediante un drop. Esta jugada no solo volvió a ampliar diferencias sino que, además, le dio una inyección anímica a Nueva Zelanda para que Beauden Barrett anote el try que más va a quedar en la retina del mundo del rugby hasta que dentro de 4 años la cita los vuelva a reunir en Japón.

Así, con un juego implacable y superior a todo lo antes visto, los All Blacks se ubican en lo más alto de la disciplina y confirman las creencias de muchos especialistas y aficionados en que el plantel actual es el mejor que vio el país de Oceanía en toda su historia.

Mientras la euforia continúa muchos se preguntan qué será de Richie McCaw, abanderado de este tremendo conjunto. «No sé si me retiro. No quiero que se acabe, por el momento sigo formando parte del equipo», declaró el jugador luego de los festejos.

Por su parte, Sudáfrica despachó a una diezmada Argentina que, entre lesiones y cansancio, poco pudo hacer para repetir el mayor logro obtenido hasta el momento (el tercer puesto en 2007). De esta forma, los Springboks derrotaron a Los Pumas por 24-13 con tries de JP Pietersen y Eben Etzebeth y penales y conversiones de Handre Pollard. Recién en la segunda parte del encuentro Nicolás Sánchez pudo abrir el marcador albiceleste con un drop y cuando la historia finalizaba, Juan Pablo Orlandi anotó un try que Sánchez correspondió con su conversión.

Precisamente, Nicolás Sánchez cerró su participación como goleador de la competencia con 97 puntos. Detrás suyo quedó Pollard con 93 y Foley junto a Cartes, ambos con 82. Además, Sánchez está en el podio de más penales anotados y más conversiones: Pollard y Carter se hicieron de 23 en ambas categorías, mientras que Sánchez marcó 20 y 13, respectivamente. En cuanto a tries apoyados, Julian Savea (Nueva Zelanda) lideró la tabla con 8 y lo siguió Milner-Skudder con 6 (el argentino Juan Imhoff logró 5).