Historia de cine

El pasado jueves 26 de enero se estrenó «The Fabelmans», la nueva película de Steven Spielberg. Un retrato de su infancia a partir del primer encuentro con el cine.

La película comienza con un pequeño niño llamado Sam, que va con sus padres por primera vez a ver una película en pantalla gigante. Ambos le explican con entusiasmo qué es el cine para que no se asuste, su padre desde la relación entre los ojos y la luz, su madre desde la ilusión de aquello que es como un sueño.

La película es «El espectáculo más grande mundo» («The Greatest Show on Earth», 1952) de Cecil B. DeMille. La impactante escena del accidente del tren se queda pegada a la cabeza de Sam y él, muy pequeño aún, no descifra aún qué de toda esa imagen lo moviliza tanto.

De esta manera, la película avanza y da forma a lo que es una premisa de crecimiento, maduración y angustia en la entrada al mundo adulto. Steven Spielberg hoy, con 76 años y luego del fallecimiento de su madre y padre, mira hacia atrás de forma reflexiva y cálida al interior de la historia de su familia durante su adolescencia.

El joven Sammy Fabelman está interpretado por Gabriel LaBelle con mucha ternura, mientras que el rol de sus padres Burt y Mitzi Fabelman están en la piel de un conmovedor Paul Dano y Michelle Williams (quien quizás llame más la atención por la intensidad de su personaje), respectivamente. El cuadro familiar se completa con otros personajes más periféricos, pero con atención en la composición de sus personalidades como, por ejemplo, las hermanas de Sammy, Bennie Loewy (Seth Rogen) o Mónica (Chloe East).

Spielberg es un director que conjuga en su cine el esquema comercial con la singularidad, esta cualidad se hace un oasis para el panorama del cine de entretenimiento o industrial en el que todo cada vez se parece más. También sus personajes, dotados de características tan propias del egoísmo como del amor, dan un respiro a las agobiantes exigencias que se depositan sobre la representación en el arte audiovisual, volviéndolos profundamente humanos.

La reflexión sobrevuela los temas de la película, la reflexión sobre el arte, la familia y la felicidad en tiempos de pensamientos ultraprocesados. Una vez más, Spielberg lo hizo, así de simple y así de superior.