Francia está a punto de dar un paso considerable en pos de acciones concretas a favor del medio ambiente con el envío del decreto que va a prohibir el uso de bolsas plásticas en las tiendas a partir del 1° de enero de 2016.
Así lo comunicó Ségolène Royal, ministra de Ecología, aunque aclaró que recién en una segunda etapa del proyecto se ampliará a comercios de frutas y verduras, que estiman será un año después.
Entre los motivos que impulsan la iniciativa, las estadísticas indican que en Francia se consumen 17.000 millones de bolsas de plástico y de este total más de la mitad terminan en medios naturales. Además, desde el Ministerio de Ecología remarcan que estos productos se utilizan tan solo unos minutos y luego se requieren cientos de años para desintegrarse, cuando no acaban afectando la salud y vida de los animales (principalmente aves y peces).
Asimismo, las cifras indican que el 75% de los residuos vertidos en el mar son desechos elaborados con plástico. Un ejemplo detallado por el organismo es que las tortugas marinas suelen confundir a las bolsas plásticas con medusas y eso afecta al 86% de la especie, con las consecuencias obvias que esto acarrea.
Con la regulación iminente, la ministra Royal además asegura que se trata de «una verdadera oportunidad para crear empleos» porque el 80% de las bolsas que se utilizan en Francia son importadas (la mayoría provenientes de Asia), número que crece un 10% más al hablar de las que se usan para frutas y verduras.
Los ejemplos de California y Mauritania
El estado norteamericano sancionó una ley poco menos de un año atrás en el que a partir del 1° de julio de 2015 se prohibió el uso de bolsas de plástico desechables y permite a los comerciantes cobrar 10 centavos por el uso de otras producidas con papel o reutilizables.
Similar a lo planteado en Francia, California tendrá una segunda etapa en la que a la prohibición actual en supermercados y farmacias, en 2016 se sumarán las tiendas y las conocidas «licorerías».
«Esta ley es un paso hacia la buena dirección: reducirá la enorme cantidad de plástico que contamina nuestras playas, nuestros parques y una gran parte de los océanos», comunicó el gobernador demócrata Jerry Brown, impulsor del proyecto que ya había dado sus primeros pasos locales en 120 ciudades del estado de California. Además, instó a copiar la iniciativa: «Somos los primeros en prohibir estas bolsas, pero no seremos los últimos».
Como algo habitual, ante una propuesta del Partido Demócrata, los republicanos se opusieron y alegaron la pérdida de puestos de trabajo y la repercusión económica en las pequeñas y medianas empresas.
Pero lejos están California y Francia de ser pioneros en el tema. Mauritania tomó la decisión hace dos años a través de un decreto, que el ministro de Medio Ambiente, Amedi Camara, sostuvo al compartir la información de que casi la totalidad de los residuos en bolsas de plástico no eran recogidos y culminaban en el medio natural y las aguas.
