París ya no es solamente bello para recorrerlo a pie sino que, desde este lunes 17 de marzo, transitar la capital francesa de esta forma se volvió un asunto vinculado con el medio ambiente y el tránsito.
Como medida ante la creciente y preocupante contaminación, los conductores de automóviles podrán circular en días alternados, además de haberse previamente eliminado el pago del alquiler de bicicletas y las tarifas en el transporte público, impulsar el uso de vehículos eléctricos y, por si esto no fuera suficiente, compartirlos.
Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, París posee 147 microgramas de partículas en suspensión por metro cúbico de aire, lo que supera ampliamente a Londres (79,7), Berlín (81), Ámsterdam (104) y Bruselas (114), entre otros.
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