Peligro inminente

La línea que separa a Estados Unidos de comenzar un ataque contra Siria es cada vez más fina, y con los últimos movimientos que se han dado en territorio árabe parece que esto es inevitable. Es cuestión de días, semanas o meses (podríamos decir horas) para que Donald Trump le de el visto bueno a una nueva escalada de invasión sobre Siria. Del otro lado no solo se encontrará con el mandatario sirio que resiste y que cree haber salido victorioso en la primera parte de este capítulo, también se encontrarán con el poderoso aliado: nada más ni nada menos que Rusia.
Estos últimos días han sido tensos en las relaciones entre Rusia y los Estados Unidos, a tal punto que en las últimas declaraciones el magnate y presidente norteamericano Donald Trump advirtió a sus pares de Rusia que es posible que, dentro de poco tiempo, misiles norteamericanos llegarán hasta los objetivos en Siria y que se preparen para recibir una lluvia de los misiles inteligentes que están desplegándose en Medio Oriente.

Invasión efectiva

A su vez, los medios internacionales ven en territorio sirio un posible enfrentamiento entre Rusia y Estados Unidos, y lejos están de querer bajar los niveles de tensión. Es así como han advertido a los rusos en Siria que se «preparen» porque en breve llegarán los misiles. Ante este panorama, podemos vislumbrar que la invasión a Siria por parte de Estados Unidos y sus aliados se hará efectiva.
Todo esto ha surgido en los últimos días luego del ataque con armas químicas en la ciudad de Duma, Siria, que tuvo un saldo de 48 muertos a causa de las bombas que contenían gases. El 7 de abril, en la ciudad de Duma, se produjeron estas ofensivas y hasta ahora Rusia y Siria han rechazado las acusaciones por parte de Estados Unidos de que ellos habían efectuado los ataques contra la población. Por su parte, las autoridades sirias y rusas han señalado a los terroristas aliados a Estados Unidos como los autores de los ataques con armas químicas.

Inacción global

En la última reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Rusia y Estados Unidos se han repartido vetos en lo que parece más un juego de política internacional que un verdadero debate y resoluciones que lleven a un acuerdo por Siria. Ninguna propuesta ha sido aceptada y no parece haber solución a corto o mediano plazo por lo que, desde los Estados Unidos, creen que es la vía militar lo más acertado.
Como si esto fuera poco, un Ministro del Gobierno de Israel lanzó una frase desafortunada al comentar que «es hora de matar al presidente sirio», que no hace más que echar leña al fuego en el conflicto en la región. Por esto y por muchos movimientos que se llevan adelante en Medio Oriente, creemos que una invasión a Siria es inminente y la preocupación mundial (mucho menos poner manos a la obra) no parece activarse.
Finalmente, lo que sí nos están mostrando los hechos es que el conflicto en Siria se vuelve cada vez más difícil de resolver y se acrecientan las diferencias. Los últimos movimientos de la Casa Blanca nos hace pensar que una invasión es inevitable y todos sus aliados tendrán presencia. Por su parte, Rusia y Siria han agrupado a todas las tropas y están en alerta ante posibles ataques. El mundo parece estar en otra sintonía ante estos hechos. ¿Será el principio de una «nueva» Irak? Recordemos que antes vimos el uso de armas químicas como pretexto para invadir países, pero que poco importan las victimas que esto ha causado.