Protestas contra impuesto a internet

Un centenar de miles de personas salieron este domingo a las calles de Budapest, capital de Hungría, a protestar por la iniciativa del gobierno del primer ministro Viktor Orbán de implementar un impuesto al servicio de internet, hasta el momento único en el mundo y que sentaría un precedente.
Este gravamen, que inicialmente sería de 150 forintos (algo así como 60 centavos de dólares) por cada gigabyte de tráfico de datos, luego de las manifestaciones del 26 de octubre fue «adaptado» a un posible máximo mensual de 700 forintos (poco menos de 3 dólares), independientemente de las descargas. Asimismo, este impuesto pretende cobrarlo directamente a las empresas que brindan el servicio y que, a su vez, harían extensivo el costo a sus usuarios.
En los próximos días se realizarán nuevas marchas por las calles de la ciudad para evitar que continúe el proyecto, ya que el gobierno representado por el partido político Fidesz (de ideología conservadora y cristiana que asumió en 2010) tiene la intención de aprobar la medida el martes 18 de noviembre.