Brooklyn, amo y señor del Este
Finalmente, la franquicia de Brooklyn Nets (antes de New Jersey) llegó al primer puesto de la Conferencia Este. La racha de siete victorias y tres derrotas lo posiciona, al menos por ahora, por encima de Philadelphia 76ers, equipo que había dominado gran parte de la temporada.
Las adquisiciones de Kevin Durant y Kylie Irving para la temporada anterior no fueron suficientes para las aspiraciones desesperadas de los Nets, sin grandes resultados en la primera parte fueron a contratar a James Harden, el máximo anotador de la liga quien, además, se encontraba ansioso por desligarse de Houston Rockets. El “big three”, casi improvisado y armado en el medio de una temporada, parecía ser la consolidación en busca de un anillo rápido. Las supuestas peleas internas entre Durant e Irving hacían tambalear la armonía del plantel, sin embargo, luego de algunos desajustes llegaron las victorias y la escalada de posiciones, pero la dirigencia de Brooklyn no quiere tomar riesgos y es así que se aprovechó de las reglas laxas que la liga armó esta temporada, en términos de contrataciones. Recordemos que la NBA permite que los agentes (jugadores) libres puedan negociar con las franquicias durante toda la temporada regular, más no entre los equipos, ya que la fecha límite fue el pasado viernes 26 de marzo. Muchas negociaciones que no llegaron a buen puerto entre las franquicias acabaron en contrataciones de agentes libres. Es decir, algunos jugadores como los casos de Drummond y Aldridge arreglaron la rescisión de sus contratos para ser considerados agentes libres. De esa manera, arribaron a Brooklyn: Blake Griffin, descontento con las bajas aspiraciones de su equipo Detroit Pistons, y el propio LaMarcus Aldrige, en el último tramo de su carrera.
La historia de la NBA nos demuestra que los conjuntos que alcanzan la máxima gloria son los que se construyen con un plan a largo plazo y no con contrataciones fastuosas sin demasiadas estrategias. Está claro que Brooklyn espera estar en la columna de las excepciones.
Sacramento Kings, la revelación de la semana
La franquicia que posee la capital del Estado de California fue el equipo de la semana en la NBA. Sacramento Kings, equipo que no suele estar en los primeros planos, ganó cuatro partidos al hilo hasta el 29 de marzo, día que venció a San Antonio Spurs por 132 a 115 en lo que fue uno de los dos partidos “back to back” en el AT&T center. En ese juego, Buddy Hield, Richaun Holmes y D’Aaron Fox marcaron 20, 23 y 24 puntos, respectivamente.
Fox, tras esta racha positiva de su equipo, fue nombrado el jugador de la semana por la NBA. En su cuarto año en la liga, sus números están en alza: 24.5 puntos con un 47.7% de tiros de campo. Si bien su rendimiento lo posiciona como un jugador que se encuentra en pleno despegue, su equipo no lo acompaña, ya que luego de esta “primavera” de victorias cayó en los tres siguientes juegos y perdió la chance de tener un récord positivo.
Sacramento Kings se encuentra actualmente en el 11° puesto en la Conferencia Oeste.
Los Angeles Lakers y un punto de quiebre
La lesión de LeBron James que lo alejó de las canchas hace unos partidos, y de la que todavía no se tienen precisiones, marcó el rendimiento desde entonces para el último campeón. La llegada de Drummond deja entrever que el equipo cambiará a un juego más físico, si pensamos que se aliará a Anthony Davis para conformar un par de torres en la zona pintada.
Sin la dirección y el armado de James, los Lakers basarán su juego en la lucha y la disputa. El base suplente, el alemán Dennis Schroeder, aparece con más minutos en cancha pero hasta el momento parece sufrir la responsabilidad de dirigir los destinos ofensivos de un equipo, que al principio de la temporada ansiaba repetir el anillo de la última temporada pero que ahora debe mirar de reojo a sus rivales que pugnan por entrar en los últimos puestos de los playoffs. La dura derrota en la “batalla de Los Angeles” contra los Clippers por 104 a 86, alarma aún más el futuro cercano, mucho más si se analizan los números de sus titulares; tan solo el catalán Marc Gasol marcó dos dígitos, solamente 11 puntos en menos de 18 minutos de juego.
