El loco mundo del espectáculo

Están cayendo como moscas

Algunos esperados y predecibles, y otros completamente sorpresivos… estas últimas dos semanas estuvieron plagadas de separación, divorcios y peleas.

Jenelle Evans («Teen mom 2») y Nathan Griffith estaban condenados al fracaso. Ahí no hubo ninguna sorpresa. Esta pareja siempre fue un caos y, particularmente, porque ella es un desastre. Se juntaron, se drogaron, quedaron embarazados, se pelearon, se juntaron, se separaron, volvieron, él estuvo en prisión por violencia, luego le propuso matrimonio y así. Hay que recordar que Jenelle tiene un nene de 6 años de una pareja anterior y la razón por la cual se hizo famosa en «Teen Mom 2», además de un bebé de 6 meses con este ente en cuestión. La separación se hizo evidente cuando Nathan no apareció para el cumpleaños de Jace, su hijo más grande. Parece que Nathan le habría metido los cuernos. Vuelvo a repetir, no me sorprende.

Caso número 2

Esta situación fue un baldazo de agua fría, sobre todo porque siempre se los vio muy felices en familia. También formaban parte de mi lista imaginaria de parejas cool. Gwen Stefani y Gavin Rossdale le dieron final a su matrimonio luego de 13 años. Mucha pelea y mucha sospecha de infidelidad hicieron que la pareja se rompiera. Como buena dupla hollywoodense, mandaron un comunicado de prensa en el que expresaron que, si bien la pareja se disuelve, van a intentar hacer todo lo posible para que sus hijos la pasen lo mejor posible. Los excantantes tienen a Kingston de 9, Zuma de 7 y Apollo de un año y medio.

Caso número 3

Estos serían solamente rumores, pero dicen las malas lenguas que la rana René (Kermit) y Miss Piggy también se habrían separado luego de haber cambiado su status romántico en Facebook.

Caso número 4

Las chicas chochas. Perrie Edwards no tanto. Zayn Malik, ex One Direction y ahora solista, acaba de suspender su compromiso con esta desconocida llamada Perrie. También habría cuernos de por medio. Parece que los amigos de ella están contentos porque la relación se terminó, ya que parece que Zayn era imposible. Mucha joda, mucho alcohol, muchos momentos incómodos y ella se los fumaba todos como mártir. Hay que recordar que él citó su relación con Perrie como una de las razones por las cuales dejaba One Direction, así que esto no era joda.

Caso número 5

Ben Affleck y Jennifer Garner, otra historia impensable. La pareja que supo correrse del foco hollywoodense para vivir en New Jersey como cualquier vecino más y conformar una hermosa familia, hoy vive una realidad muy distinta. Él se hace el dolobu y a veces usa su anillo, todo para confundir a la prensa. Ella no dice nada. Los rumores dicen que Jennifer se cansó de sus problemas. Recordemos que Ben Affleck pasó por momentos muy tensos al superar una terrible adicción al juego. Sin embargo, cuando comenzó a salir con Jennifer nunca más se lo vio en casinos ni tomando ni nada. Pero parece que el rol del futuro Batman y la presión que eso conlleva habrían sido demasiado para la cabeza de Ben.

Caso número 6

Kourtney Kardashian y Scott Disick. Acá estoy en duda sobre cuán predecible era. Es decir, la historia de «me puse re en pedo, hice papelones y estuve con un par de minas» ya la vivimos varias veces… pero por alguna razón, y al igual que Kourtney, siempre pensamos que Scott iba a cambiar.

Obvio que no. Lo demostró una vez más cuando aparecieron fotos de él en Mónaco con una damisela que no era Kourtney. Ella lo echó de la casa y él le mandó menajes subliminales por las redes sociales para pedirle que lo acepte de nuevo. Esperemos que no la convenza.

La buena noticia de la semana es que Jennifer Aniston finalmente se caso con Justin Theroux. La fiesta fue secreta, al punto que los invitados pensaron que estaban asistiendo al cumpleaños de él. 6-1 va ganando el garrón, así que por las dudas agarrá a tu novio/novia y recordale todo tu amor.