En carrera hacia Marte

Luego de un trabajo que demandó más de 15 años entre las agencias espaciales de Europa y Rusia, el cohete Protón-M despegó sin inconvenientes desde el cosmódromo de Baikonur, la estación rusa en Kazajistán.
«Estamos camino hacia marte», expresó Jan Woerner, director general de la Agencia Espacial Europea (ESA), al referirse al objetivo de la misión, que se realizó en horas de la mañana de este lunes y que se especula con llegar a suelo marciano para el próximo mes de octubre.
Una vez concluido el trayecto de Protón-M se dividirán los trabajos, por lo que el satélite Trace Gas Orbiter (TGO) se va a dedicar exclusivamente al estudio de los gases que componen la atmósfera en Marte durante 4 años y sobrevolará el planeta a 400 kilómetros de altitud, mientras que el módulo Schiaparelli tocará la superficie del planeta rojo por un lapso inferior a una semana para servir de experiencia para futuros amartizajes (entre ellos, el del ExoMars, estipulado para 2018).
Otro de los equipos desarrollados especialmente por ESA y su par ruso, Roscosmos, para esta misión es el Meridiani Planum, que llegará a Marte junto con Schiaparelli para realizar diversos análisis detallados sobre características del suelo, presión y temperatura para permitir que por primera vez se logre establecerse en tierras marcianas sin problemas (el Beagle en 2003 lo intentó, sin éxito).
«Las condiciones de Marte en el pasado se parecían mucho más a las de la Tierra actualmente. Se cree que en la Tierra hay la misma cantidad de agua que hace millones de años, mientras que en Marte se ha perdido gran parte porque escapó de la atmósfera», manifestó el científico de ESA, Hakan Svedhem.
Sobre Marte, debemos saber que cuenta con menor gravedad que la Tierra (3,711 m7s2 frente a 9,807 de nuestro planeta), tiene dos polos donde las temperaturas se acercan a -140 grados centígrados y tiene en su órbita dos satélites naturales: Fobos y Deimos.