Holanda quiere legalizar

Con solamente 77 votos a favor y 72 contrarios a la iniciativa, la Cámara Baja holandesa aprobó este martes un proyecto de ley para regular el cultivo y consumo de marihuana en los Países Bajos. La intención del Congreso está relacionada con el objetivo de reducir plantaciones clandestinas y poner dentro de un marco legal un asunto que contiene grises, como la aprobación para el consumo en más de 600 tiendas (llamadas «coffee shops», que por ley solo cuentan con 500 gramos para venta diaria) y la posesión de menos de 5 gramos para consumo personal, pero la negativa a los ciudadanos de tener sus propias plantaciones y la comercialización mayorista.

Estándares de calidad

De esta manera, el proyecto llevado adelante por Vera Bergkamp, diputada socioliberal por el partido Demócratas 66 (D66), daría la posibilidad de que los propietarios de los locales autorizados puedan comprar marihuana a productores autorizados bajo un «sistema cerrado». «Será mucho mejor para la salud de los ciudadanos si sabemos de donde viene la marihuana y podemos exigir mejores estándares de calidad», expresó la legisladora, que además cuenta con el respaldo de una investigación de la Universidad de Radboud que concluyó que la legalización de la producción de cannabis tendría como consecuencias beneficiar a la salud pública y los derechos humanos. Vale agregar que solo en 2015 la policía holandesa realizó requisas en casi 6.000 plantaciones ilegales.

En relación a la votación en el Congreso, la iniciativa contó con ek apoyo de los bloques de los verdes de Groenlinks, los animalistas del PvdD, laboristas y socialistas. Los que se posicionaron en contra están comprendidos por el Partido Popular por la Libertad y la Democracia, la extrema derecha del Partido por la Libertad y los partidos cristianos.

«Si el cultivador es legal se acabó hacerlo a escondidas, en sótanos y desvanes en la ciudad, naves industriales o cobertizos y establos en el campo», afirmó Bergkamp. Ahora es el turno del Senado, el cual no cuenta con mayoría de los propulsores de los sectores más progresistas, con lo cual no se garantiza que prospere el proyecto. Habrá que esperar.