Miles de personas se manifestaron públicamente este sábado en Alemania contra el avance de la ultraderecha, que propuso expulsar migrantes en forma masiva.
Bajo la consigna «Defiende la democracia», estas protestas se dieron en las localidades de Braunschweig, Erfurt, Frankfurt y Kassel, entre otras, luego de que el partido Alternativa para Alemania (AfD) haya debatido con un grupo de neonazis y empresarios en Potsdam, un proyecto que tiene como objetivo la «remigración»: deportar inmigrantes a su país de origen, solicitantes de asilo, residentes y ciudadanos alemanes «no asimilados». «Tenemos que expulsar por fin a lo grande a quienes no tienen derecho a permanecer em Alemania», expresó el año pasado el canciller Olaf Scholz, perteneciente a AfD.
Además de organizaciones no gubernamentales, la Federación Nacional de Fútbol se hizo eco del llamado y manifestó rechazo a la iniciativa organizada por Martin Sellner, referente de la «nueva derecha» y del Movimiento Identitario.
Al respecto del proyecto de la AfD, vale destacar que la agrupación política ingresó al Parlamento en 2017, ocupa el segundo lugar en la bancada opositora y estimaciones recientes en Alemania la dan como favorita para las próximas elecciones regionales en tres Estados, que aglomeran casi 10 millones de personas: Brandeburgo, Sajonia y Turingia (donde el presidente del partido, Björn Höcke, fue a juicio político por usar un eslogan nazi).
