Crisis democrática en Venezuela

El Gran Polo Patriótico (GPP) se impuso en las elecciones parlamentarias del fin de semana en Venezuela y, con 68,43% de los votos sobre 98,63% contabilizado, el partido oficialista suma un triunfo tan abrumador como desgastante para el sistema democrático.

Al respecto de este resultado, boicoteado por diversos sectores opositores al gobierno de Nicolás Maduro, «ha sido una gigantesca victoria de las fuerzas de la revolución bolivariana», expresó el jefe de prensa, Jorge Rodríguez, en conferencia, sin aludir a la falta de interés de gran parte de la población para decidir quiénes obtendrán los 277 escaños en disputa. Vale mencionar que 20,7 millones de habitantes se encontraban en condiciones de elegir, pero solamente asistieron a las urnas poco más de 5,26 millones.

Con una escasa participación del 30,5% del electorado, el gobierno de Nicolás Maduro recibió el máximo apoyo por sobre Acción Democrática (AD) y el Comité de Organización Política Electoral Independiente (COPEI), que unieron fuerzas pero obtuvieron 17,95% de los sufragios (casi un millón de votos), según el Consejo Nacional Electoral (CNE).

Desde los Estados Unidos, Michael «Mike» Pompeo tuiteó: «El fraude electoral de Venezuela ya se cometió. Los resultados anunciados por el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro no reflejarán la voluntad del pueblo venezolano. Lo que está sucediendo es un fraude y una farsa, no una elección», afirmó el secretario de Estado.