Charlamos con el periodista Marcelo Fiasche sobre sus comienzos, el sorprendente traspaso de Lionel Messi al PSG, la pandemia y el deporte, y su visión de los grandes medios.
Nació en Lanús y, ya de chiquito, la curiosidad que tenía naturalmente, el deseo de estar informado escuchando Radio Rivadavia o leyendo los diarios completos (que con mucho esfuerzo compraba su padre) le dieron las señales necesarias para encontrar el camino que recorrería tiempo después: “A mí me gustaba leer todo el diario, tenía la capacidad de fijar lo que leía y contar todo lo que había leído a mis amiguitos. Para mí lo que estaba en el diario era la verdad. Tenía curiosidad por saber y ansiedad por contar: eso me dio la pauta de lo que quería ser, después me di cuenta que de eso se trataba un poco el oficio de periodista”, asegura Fiasche.
Sobre sus comienzos y primeros pasos a la hora de estudiar una carrera y encontrar un lugar que reúna lo que su pasión le exigía, relata: “Cuando terminé el colegio no me cerraba la carrera de Ciencias de la Comunicación y no me anoté. Tenía claro lo que quería hacer, así que le di vueltas. Me anoté en Historia en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en un principio y trabajaba en la editorial Estrada y, trabajando ahí, descubrí Tea (escuela de periodismo fundada en 1987). ¿Viste cuando te ponés un calzado que es exactamente tu número y decís ‘qué maravilla’? Eso fue para mí Tea, me abrió un mundo nuevo, me voló la cabeza. Al toque me sentí periodista”, confiesa con mucho orgullo Fiasche.
“Trabajaba en una financiera, me iba bien económicamente y pero era pésimo para mi cabeza. Nunca dudé de trabajar de periodista y renunciar al presente económico, igualmente. En el tercer año, la escuela me propuso pasantías que agarré: un móvil en una radio de Lanús y después trabajo en un canal de cable en Belgrano, donde trabajaba Juan Pablo Varsky y al tiempo fui a TN y no paré durante estos últimos 27 años”, recuerda risueño el periodista, y aclara algo que mucha gente desconoce sobre su título: “A Todo Noticias entré como productor, y doy clases en Tea y Deportea, pero me recibí de periodista general a pesar de que me encanta el periodismo deportivo”.
Sobre la última noticia que revolucionó al mundo del deporte, el sorprendente traspaso de Lionel Messi del Barcelona al Paris Saint-Germain (PSG), considera que «fue muy fuerte la decisión para el periodismo y la familia Messi. Se vivió como una mezcla de sensaciones, es lindo ver a un argentino tan elogiado por todos, ser el centro del mundo, y ver que una comunidad no tan futbolera como la francesa tenga a Messi, es muy movilizante también. Me hubiera encantado estar cubriendo todo pero no tengo las dos vacunas, así que me cortaron las piernas”, afirma haciendo mención a la famosa frase de Diego Armando Maradona. Y agrega una nueva referencia al jugador: “Maradona dijo alguna vez que todos los ídolos en el Barsa terminaban mal pero no lo creo, es circunstancial. Es decisión política del fútbol. Joan Laporta quería ser presidente de Barcelona de nuevo y lo usó a Messi para eso, pero sitiado por situaciones sobre la economía del equipo, tomó otra decisión. Hubo un tironeo entre LaLiga, la familia de Messi y el club, que hizo que no lo renovaran contractualmente. Yo le creo a Messi que lo tomó de sorpresa”, asegura el periodista.
Respecto a los medios y cómo están parados actualmente a la hora de informar, Fiasche considera que “la grieta que uno ve en la sociedad, también está ahí. Es un mal de este tiempo y la gran mayoría no acepta los grises, se cree que la razón está de un lado u otro y que, en el medio, no hay nada. Yo pertenezco a esa minoría de grises. Soy bastante crítico de todos los gobiernos que han pasado, pero el que tiene esa postura siempre es mal visto por las dos partes. Los medios están atravesados por esa grieta y, en un país donde el nivel de corrupción es tan grande, el nivel de pobreza es tan extremo como en Argentina y los que se dedican a la economía no pegan una, si querés encontrar mugre la vas a encontrar. No me gusta el periodismo que se hace en general”, confiesa polémico el periodista.
En cuanto a la pandemia y el manejo del público en las canchas durante este contexto, Fiasche se sincera. «Hay dos cosas que me tienen cansado: estoy harto de los cinco cambios hablando de fútbol, eso servía cuando arrancó la pandemia, ahora ya caducó. Y la otra es que la gente no pueda ir a la cancha. Creo que los dirigentes del fútbol argentino nos toman el pelo y los dirigentes políticos que tienen a cargo este tema también, porque hace meses veo que mucha gente como yo que somos socios de un club y seguimos pagando la cuota igual, nos quedamos en casa y vemos cómo un montón de personas van a ver a un equipo por ser ‘allegados’ o ‘conocidos’“. Se están haciendo los salames y esto hay que solucionarlo. Que pongan condiciones, por ejemplo: las dos vacunas o con aforo limitado o que se termine que solo vayan unos pocos».
Sobre la dirigencia del fútbol, también mantiene una postura crítica que argumenta de la siguiente manera: “Es lamentable, la Copa América no me va a permitir que se tape lo otro: arbitrajes sospechosos, que no haya descensos, torneo de 28 equipos, es el día a día de nuestro deporte más popular y es espantoso todo. Por suerte, lo cuestiono con mucha libertad cada fin de semana. Hay dirigentes que serían insultados o silbados si la gente vuelve a la cancha, creo que están evitando eso también. Estoy a favor de lo popular, que la gente vuelva forma parte de eso y, tarde o temprano, tienen que articular esta situación”, afirma el periodista.
Por último, cuenta que hubo mucha gente importante a lo largo de su vida que lo acompañó en diversos momentos pero, más allá de eso, resalta con mucha emoción: “Siempre fue importante mi viejo, él falleció cuando yo era muy chico, era un obrero, pero increíblemente fue el que me inspiró a ser periodista porque era fanático de la información. Era un italiano que vino a la Argentina muy jovencito después de la guerra y no había podido estudiar todo lo que hubiera querido, pero tenía esa pasión por informarse: compraba dos diarios casi todos los días a pesar de que representaba un costo, porque éramos una familia muy humilde”. Asimismo, agrega que “cuando hablo de la profesión, pienso en él que, sin darse cuenta, me acercó al oficio más hermoso del mundo. Cada día que pasa agradezco mucho poder ganarme la vida de lo que siempre soñé ser. Llegar al mejor lugar, trabajar en canal Trece es como jugar en el Barcelona o PSG, tenés todas las herramientas para poder trabajar. También amo dar clases en Tea y Deportea. Soy muy afortunado”.
Y se nota, Fiasche transmite en su mirada toda esa pasión que intenta describir con palabras y que hace que brille tanto en cada labor que ejerce en el mundo del periodismo y la enseñanza.