El mundo se puso raro

Se viene fin de año y el Gobierno Nacional quiere hacerse amigo del campo y del establishment… pero aumentando retenciones y evitando que ganen guita. Sergio Berni está preparando su salida del gobierno provincial y habla sin pelos en la lengua como cuando ya estás en el llano. Juntos por el Cambio ya empezó la pelea por los cargos en el Congreso, menos mal que todavía no fueron las elecciones presidenciales. Carlos “Doctor Muerte» Kambourián pagó gastos particulares con la tarjeta corporativa del Hospital Garrahan… son las costumbres «amarillas».

Noticias de la Gorra

El Gobierno quiere tirar lazos de amistad con el campo… pero el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, salió muy atinado a decir que si sigue aumentando la carne les va a meter más retenciones. Al parecer lo llamaron, lo sentaron y lo cagaron a pedos para después salir a desmentir públicamente. Cristina Fernández ni chistó ante este reto a su pollo,por lo que solo queda pensar que está tomando envión.

El que también estuvo tranquilo con las declaraciones, buscando ganarse el apoyo del establishment, es el ministro de Economía, Martín Guzmán, al decir que “necesitamos evitar que los ricos se hagan más ricos”. Hasta ahora logrando bárbaro que los pobres se hagan más pobres.

El edificio del Clarín en el barrio de Barracas sufrió la semana pasada el ataque con bombas molotov de un grupo de 9 personas, hasta el momento, sin identificar. Esto dio que hablar a todo el arco político, tirando misiles para ambos lados: la oposición acusó al kirchnerismo de estar detrás de una nueva amenaza a la libertad de expresión y el oficialismo dijo que es un auto atentado para victimizarse. Lo interesante es que Clarín acusó a la Policía de la Ciudad por armado de causas, justamente, en el marco de la investigación por el asesinato del joven futbolista Lucas González. La policía dice que fue un “grupo de anarquistas que actúan en la zona”. Creemos que alguien estuvo leyendo el libro de Ramon Falcón.

En medio de los festejos del oficialismo posteriores a las elecciones, vaya uno a saber por qué, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, aseguró que “el gobierno sufrió una derrota rotunda”. ¿Viste cuando tenés ganas de irte a la mierda de un laburo y todo te chupa un huevo? Bueno, eso.

Donde está tranquila la cosa es en las municipalidades en la provincia bonaerense, ya que los intendentes vuelven a sacarse los ojos ante la posibilidad de que vuelva la reelección indefinida. Lo que se dice, la cosa sana de la política, porque no hay nada más normal que un tipo que democráticamente gobierne por mas de 30 años. Solo puede salir bien.

Además, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, anunció que a fin de año se termina la doble indemnización y se escucharon varios descorches en pymes y multinacionales, mientras se lustran las botas en las oficinas de Recursos Humanos para festejar el año nuevo.

Por su parte, el senador Marcos “Kaniche” Castello, del Frente de Todos por la provincia de Santa Fe, cobró medio millón de pesos por dar un recital en el Festival de la Torta Frita. Está dura la cosa, ya no alcanza con chuparle una teta al Estado.

Cristina Fernández convocó a la última sesión del Senado con quórum propio para darle curso a 116 Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó Alberto Fernández. Preparate para ver las leyes que van a colar en esta última jugada.

En otro orden de temas, hay pelea de halcones y palomas dentro de Juntos. Finalmente, Patricia Bullrich bajó el copete y le entregó la presidencia del bloque en el Congreso a Cristian Ritondo… parecen peronistas.

El recuento final de votos le dio entrada por la ventana a Florencio Randazzo y le cagó una banca a uno de los «liberaludos», que terminaron a las puteadas entre ellos. Posta que estos tipos no tienen la más remota idea de cómo hacer política. En Formosa, un profesor amenazó con mandar a marzo a un alumno si iba a un acto de Javier Milei… está mal, pero no tan mal.

Para culminar, te contamos que los talibanes le piden a la TV local que no pase películas donde aparecen mujeres… deben pensar que tienen dientes en sus vaginas. ¿Te acordás del mediático doctor Carlos Kambourián, expresidente del Hospital Garrahan, también conocido como «Doctor Muerte» por sus pronósticos durante la pandemia? Bueno le debe más de 1 millón de pesos y 11.700 dólares al hospital por implementar una tarjeta corporativa con la que pagó cenas de lujo, hoteles, nafta y viajes que nada tenían que ver con el laburo. Menos mal que estuvimos en manos de gente ética y seria durante el quilombo pandémico.