Perón, una huella en la política

Juan Domingo Perón fue una persona que marcó la historia argentina y en la que aún se encuentra su impronta. No solo influyó en la política del país durante su exilio sino que, a 39 años de su muerte, su figura sigue despertando adhesiones y rechazos masivos. Prácticamente no hay términos medios en lo que a sentimientos se refiere. El movimiento político que creó sigue siendo una de las fuerzas políticas más importantes e influyentes de Argentina.
peronNació un 8 de octubre de 1895 en Lobos e ingresó al Colegio Militar a los 16 años, del que egresó en 1913 con el grado de subteniente. A finales de los años 30 estuvo en Italia como observador militar.
En junio de 1943, ya con el grado de coronel, fue integrante del Grupo de Oficiales Unidos (GOU)  que derrocó al presidente Ramón S. Castillo. En el nuevo régimen fue, en un principio, secretario de Guerra bajo el mando del general Pedro Ramírez, pero en noviembre de ese año se convirtió en secretario de Trabajo y Previsión, puesto desde el que se dedicó a reorganizar al movimiento sindical argentino, otorgando numerosas conquistas sociales con una visión reivindicatoria y nacional del trabajo y promovió una legislación protectora inspirada en los principios de justicia social. Posteriormente, fue vicepresidente y secretario de Guerra en la presidencia del general Edelmiro Farrell.
El año 1945 fue el que cambiaría su destino. Su labor a favor de la clase trabajadora generó desconfianza en muchos de los mandos del Ejército, que mantenían una concepción conservadora y elitista de la sociedad argentina. Entre sus opositores se encontraba el jefe de la guarnición de Campo de Mayo, el general Eduardo Avalos. Y el enfrentamiento entre ambos se resolvió con la renuncia de Perón a sus tres cargos: vicepresidente de la Nación, secretario de Guerra y secretario de Trabajo y Previsión. El 13 de octubre de 1945 fue detenido en la isla Martín García.
Eva-Peron_1927905cCuando la situación de Perón se hizo pública se declaró una huelga general a nivel nacional y los trabajadores se dirigieron hacia la Plaza de Mayo a exigir la liberación de Perón. La noche del 17 de octubre Perón fue liberado y se dirigió hacia la multitud que estaba reunida allí. Luego pidió su retiro de las Fuerzas Armadas e inició su propio camino político. Ya estaba casado en segundas nupcias con Eva Duarte, que jugaría un rol importantísimo en la carrera política y en la popularidad de Perón.


Las elecciones
juan1En febrero de 1946 el gobierno militar se vio obligado a llamar a elecciones presidenciales. Perón se presentó por el Partido Laborista con la fórmula Perón-Quijano. El armado político incluía a los trabajadores de sectores independientes y desprendimientos progresistas de los partidos tradicionales como la Unión Cívica Radical (al que pertenecía el candidato a vicepresidente), el Partido Conservador y el Partido Socialista. Su adversario fue un frente político denominado «Unión Democrática», integrado por los sectores más conservadores de la sociedad en alianza con la izquierda internacionalista, como el Partido Comunista, y apoyado abiertamente por el embajador de los Estados Unidos de Norteamérica, Spruille Braden.
Perón triunfó en las elecciones con el 52 por ciento de los votos y asumió la Presidencia de la Nación el 4 de junio de 1946. Ya en el Gobierno, fundó el Movimiento Peronista. Su gestión fue de una gran impronta por lo nacional y social. Basó su gobierno en una nueva concepción política, el Justicialismo, y otorgó beneficios a los trabajadores a través de aumentos y otras herramientas. Nacionalizó los trenes y financió grandes obras públicas, dando así gran importancia a la acción estatal.
El segundo mandato
En 1949 se reformó la Constitución Nacional y se incorporaron al texto de la misma los nuevos derechos sociales, como también el voto femenino, que había sido aprobado en 1947.
peronEn 1951 la formula Perón-Quijano fue reelecta por otro período de seis años con el 62 por ciento de los votos. En esta ocasión se impuso a la Unión Cívica Radical por más de 30 puntos. En esta presidencia falleció Evita, lo cual le causó un gran vació e influyó en su actividad.
En el año 1953 sentó las bases de la integración latinoamericana con Chile y Brasil mediante el pacto ABC. Durante este período se acentuó su enfrentamiento con la Iglesia Católica, en una lucha que incluyó la quema de iglesias y su mandato no llegó a término, ya que el 16 de setiembre de 1955 el gobierno fue derrocado por un golpe militar apoyado por los sectores más reaccionarios de la sociedad.
El exilio y la resistencia
Después de su derrocamiento, Perón inició un largo exilio: primero por países latinoamericanos como Venezuela y República Dominicana, y durante su estadía en Centroamérica conoció a María Estela Martínez, quien se convertiría en su tercera esposa, más conocida como Isabelita.
Desde el exterior y ya instalado en España, su quinta de Puerta de Hierro fue el lugar de peregrinaje de todos los peronistas que le pedían consejos para llevar adelante la resistencia contra una dictadura que había prohibido incluso decir su nombre. Todo lo que recordara al peronismo o a su fundador quiso ser borrado del mapa.
La proscripción política del Movimiento Justicialista incluyó persecución a sus integrantes mediante fusilamientos, cárcel y destierro. Este destierro se prolongó por 18 años, durante los cuales las Fuerzas Armadas asumieron el control político del país.
Perón mandaba mensajes y grabaciones a sus seguidores sobre cómo combatir a la dictadura. La influencia de Perón era de tal magnitud que en los comicios que se celebraron en este lapso sus seguidores votaban según la opinión de su líder. Tal fue el caso de las elecciones de 1958, cuando llamó a votar por Arturo Frondizi. En otras oportunidades su pedido fue el voto en blanco.
17-de-octubreEl regreso del líder recién se cristalizó el 17 de noviembre de 1972 en el famoso vuelo chárter de Alitalia donde lo acompañaron una multitud de dirigentes partidarios y simpatizantes famosos. Tras un breve retorno a Europa, el regreso definitivo fue el 20 de junio de 1973, el día de la tragedia de Ezeiza. Se trató de un enfrentamiento armado entre militantes de derecha y de izquierda del movimiento peronista en las cercanías del aeropuerto internacional de Ezeiza, en medio de la multitud que intentaba llegar a la estación aérea para recibir al líder.
La dictadura de Alejandro Agustín Lanusse tras el Cordobazo y otras protestas sociales convocó a elecciones para 11 marzo de 1973, pero una cláusula de residencia impedía la postulación de Perón. El Justicialismo presentó la fórmula Cámpora-Solano Lima. Los cánticos de “el tío en el gobierno, Perón en el poder” demostraban quién era el líder en realidad. Y el mando se hizo efectivo tan solo 49 días después con la renuncia del presidente y el vice.

La tercera presidencia
El 23 de septiembre de 1973 Perón, acompañado por su esposa, fue electo presidente de los argentinos por tercera vez, hecho inédito en la historia argentina. El triunfo fue aplastante: más del 60 por ciento de los votos, mientras que el radicalismo no llegó al 25 por ciento. Pero el país y Perón eran otros.


Argentina estaba en una espiral de violencia que ni siquiera el fundador del Justicialismo, pudo detener. Ambas facciones del movimiento estaban en una lucha abierta que no hizo más que empujar al país al abismo. También actuaba la agrupación parapolicial Alianza Anticomunista Argentina (la AAA, organizada por José López Rega) que perseguía y asesinaba a militantes de izquierda.
El 1° de julio, a los 78 años, Perón moría y dejaba al país en una situación de desesperanza y violencia. Su esposa quedó a cargo de la primera magistratura en un país sumido en el caos y que se aproximaba a su hora más negra.
El funeral del general movilizó a millones de personas, tras varios días de duelo nacional en los que el cuerpo fue velado en el Congreso de la Nación por cientos de miles de personas. Los restos fueron trasladados a una cripta en la Quinta Presidencial de Olivos. El 17 de noviembre de 1974 los restos de Evita, que estaban en España, fueron trasladados por el gobierno de María Estela Martínez de Perón y depositados en la misma cripta.
Por delante del féretro que contenía los restos de Perón desfilaron 135 mil personas y en las calles aledañas al Congreso más de un millón de argentinos quedaron sin dar el último adiós a su líder. Dos mil periodistas del exterior cubrieron todos los detalles de las exequias.
Tras la caída del tercer gobierno peronista los restos fueron trasladados al Cementerio de la Chacarita. El 17 de octubre de 2006 sus restos fueron trasladados a la quinta de San Vicente, que le había pertenecido y que fue transformada en un museo en su honor.
Fotos: www.historiadelperonismo.com