Desempleo y drogas explican la inseguridad

«El crecimiento del desempleo y del consumo de drogas están entre los factores que hacen que la inseguridad suba, y que hay que tener en cuenta», subrayó el especialista en Seguridad Martín Durán, al analizar las estadísticas sobre el aumento de hechos de inseguridad en los últimos años.

Durante una entrevista en Línea de Noticias, Durán se refirió a cómo está enfrentando esta problemática el Gobierno Nacional y mencionó «las cámaras con reconocimiento biométrico para los evadidos de la Justicia».

Además, agregó que «también se está trabajando con los puestos policiales móviles, con cámaras que giran 360 grados, que graban en tiempo real y permiten monitorear más de lo que puede ver el policía». El especialista explicó que «son como unas casitas que se suben y quedan en altura. Se trajeron 10 aparatos de Estados Unidos, tienen visión infrarroja y están equipadas con comunicación wifi en tiempo real, por lo que permiten dar una alerta temprana» ante la comisión de un hecho delictivo.

Respecto a estas cámaras, Durán comentó que se adquirieron 300 licencias para unos 7 mil equipos y señaló que «son pocas, pero seguramente se van a comprar más». Asimismo, subrayó que «no se pueden utilizar todas las cámaras con reconocimiento facial todo el tiempo, porque sería desaprovechar un recurso». Esto se debe, explicó, a que «en ciertos ángulos, con ciertos niveles de luz, no reconoce bien, y entonces se migra el software a otra cámara».

Sobre los dispositivos de reconocimiento facial, el especialista indicó que «tienen definición 4K, ultra HD, y son de origen ruso y movilidad de 360 grados. Hay que comprar más cámaras y ver qué resultado dan. Los sistemas nuevos necesitan tiempo para evaluar su prestación».

Si bien reconoció que uno de los mayores temores de la gente es el control poblacional que se podría hacer con estos dispositivos, Durán indicó que «el patrón de comportamiento también se obtiene con las tarjetas de crédito».
Un tema que generó polémica es la inminente provisión de pistolas taser para su uso por parte de la policía. En ese sentido, Durán explicó que «las taser son pistolas no convencionales, no letales. Es un arma de apoyo, que no se puede utilizar en todos lados, y que no dispara balas, sino descargas eléctricas».

Las taser generan una descarga que provoca «espasmos musculares no voluntarios», señaló Durán, y remarcó que «se utilizan en espacios reducidos, con alta concentración de personas, donde no se pueden usar armas convencionales».

Por otra parte, Durán sostuvo que «hay que ver cómo se usan, se pueden utilizar bien o mal. Las taser que se compraron tienen trazabilidad, o sea que se graba la cantidad de veces que se usó, todo. Si alguien descarga 14 disparos en una persona, por ejemplo, va a tener que enfrentar a la Justicia».

Finalmente, Durán indicó que hubo un proceso en la compra de estas pistolas y que la cuestión «evolucionó». En 2010, Macri las quiso traer siendo Jefe de Gobierno y tuvo que ir a la Justicia, que en 2016 le dio la razón, se hicieron las pruebas y en 2018 comenzaron las compras. Es un arma cara, porque cada una cuesta entre 3.000 y 3.500 dólares, y los contenedores de utilización salen unos 35 dólares. «Posteriormente -cerró Duran- hubo que armar un reglamento, entrenar a la gente. No las puede utilizar cualquier persona. Y todo esto lo hizo el fabricante. Hasta viajaron capacitadores para entrenar al usuario final».