Desde Chañar Ladeado, un pueblo de la provincia de Santa Fe, la banda Segundo Juan presenta su nueva canción “Ciudad digital”, con un sonido prolijo y trabajado. Es un nuevo adelanto de lo que será su segundo disco de estudio, que se llamará «Caminata Lunar». “Decidimos no enroscarnos tanto, hacer algo más acorde a nuestro presupuesto y terminó saliendo mejor que el disco anterior, porque todo quedó más natural, logramos un proceso más minimalista”, nos cuenta el cantante Santiago Bounafe, al tiempo que reconoce que lograron el sonido que mejor identifica a la banda en la actualidad.
Con un video basado completamente en animaciones, “Ciudad digital” puede funcionar como una crítica a una realidad en la que lo digital parece marcar el camino en el mundo de la música, pero los propios músicos admiten que “lo digital es algo inevitable y no nos molesta la digitalización, pese a que es cierto que pierde la esencia un poco de lo que es el error, lo orgánico humano, algo que yo en la música valoro mucho”.
Entonces, ¿hacia dónde va la crítica?
«A lo mejor sí me parece un poco aburrido cuando se usa de una manera monótona, y los mensajes que se dan, que yo no estoy de acuerdo. La música hoy habla acerca de ver quién ‘la tiene más larga’, eso no me parece interesante, me aburre, parecen panelistas de Jorge Rial que se pelean entre ellos.
El otro día veía a Residente que se peleaba con otro y esas cosas me aburren. Es todo muy parecido, todo muy igual y la música se vuelve muy descartable. Para mí los músicos que se acomodan a toda huella y no marcan la propia quedan livianos, se evaporan, las canciones duran uno o dos meses y chau. Por eso cada vez hay menos clásicos.»
¿Ustedes qué artistas toman como referentes a la hora de hacer su música?
«Hay muchos artistas que hicieron grandes genialidades, para mí el rey del condado es Charly García. No lo tomo como referencia porque es algo imposible. Tenemos una influencia bastante británica en lo que se viene en este disco, me parece a mí. Lo dirán mejor quienes lo escuchen.»
Segundo Juan se completa con Juan Varesi (guitarra) y Aron Monetti (batería), y visitaron la Ciudad de Buenos Aires en diferentes ocasiones, con shows en La Trastienda o Lucille y, ante la pregunta de si les gusta venir por estos pagos, rápidamente responden que les encanta. “En nuestro pueblo a lo mejor la gente no está tan dispuesta a escuchar bandas nuevas, y pasa lo mismo en Rosario, que es una ciudad muy hostil para el under, se encierran más en los clásicos. En Buenos Aires vemos que eso no pasa, hay una movida de bandas nuevas, la gente está más dispuesta y vemos que tienen ganas de descubrir música”.
¿Es difícil el camino?
«Es difícil, depende de la manera en que se lo toma uno. Nosotros somos tres amigos de toda la vida. En lo que es diversión, el camino es hermoso y la pasamos muy bien. Gracias a la banda conocimos muchos lugares como Jujuy o Tucumán.
Ahora, si lo llevamos al camino de llegar a algún lugar, tocar en festivales, sonar en radios importantes, en ese caso sí es más difícil. Se habla mucho de que el rock está muriendo, pero si en las grandes radios siguen pasando canciones de hace tres o cuatro décadas, te diría que si no inculcan un poco lo nuevo se hace complicado, porque el adolescente no quiere escuchar lo mismo que escucha su papá o su mamá, porque es el algo viejo para ellos. Si las radios y los festivales siguen poniendo a las mismas bandas es difícil, ni te dan la oportunidad de que te escuchen.»
¿Y se van abriendo las puertas?
«Las puertas se van abriendo, hay que ver qué puerta abrís, porque hay mucha gente que quiere lucrar con las bandas y lo hacen mal. Me parece perfecto que se lucre, pero ofrecé algo. Es difícil a veces ver que hay detrás de la puerta, aunque con los años uno va afinando el olfato. Lo importante es disfrutar.»
Su primer disco fue en plena de pandemia, ¿cómo fueron llevando esos tiempos como banda?
«Fue duro para nosotros porque éramos una banda acostumbrada a tocar mucho en vivo, somos adictos al vivo. Este disco que se viene es el que somos más nosotros, el disco anterior se largó en plena pandemia, lo tocamos muy poco, solo lo pudimos presentar vía streaming en La Trastienda. Fue duro no tocar en vivo.
Trabajarlo nosotros a este nuevo disco nos modificó la manera de trabajar, de ver que lo importante es lo que uno quiere transmitir. Como toda banda under, venimos castigados, pero cada latigazo que recibimos nos da risa. Nos reímos a veces de las desgracias, eso es lo divertido de esta banda, a veces decimos ‘mirá cómo nos cagó aquel’. Pero bueno, al mismo tiempo no queremos que nos pase más.
Queremos divertirnos, pero haciendo las cosas en serio. Yo veo que muchas bandas hacen pose y después cuando los conocés son todo lo contrario, me ha pasado de conocer mucha gente que pensé que tenían una postura y me desilusioné varias veces. Nosotros somos gente sencilla de pueblo, y posta que si decimos algo es realmente así, lo único que queremos es tocar y tratamos de transmitir lo que sentimos.»
