El Premio Nobel de la Paz 2023 fue concedido a Narges Mohammadi, una activista iraní que actualmente esta presa.
La activista Narges Mohammadi, de 51 años, lleva adelante campañas por los derechos de las mujeres, la democracia y en contra de la pena de muerte en Irán, durante varios años.
El premio que se le concedió fue por «su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y sus esfuerzos por promover los derechos humanos y la libertad para todos», así lo anunció Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Nobel noruego.
Mohammadi tuvo que enfrentar 13 arrestos y fue condenada en cinco ocasiones e, incluso, recibió 154 latigazos, los cuales fueron ordenados por la justicia de ese país.
Las condenas estuvieron basadas en acusaciones como «delitos relacionados con la seguridad nacional». Varios organismos internacionales de derechos humanos se opusieron, denunciando que eso fue una represalia por su activismo.
En 2021 fue detenida luego de haber asistido a un funeral en memoria de una persona que fue asesinada en las protestas nacionales del 2019, que se llevaron adelante por el excesivo precio de la gasolina en ese país. Actualmente está cumpliendo una pena de 16 años en la prisión de Evin en Teherán.
Su marido, Taghi Rahmani, también pasó 14 años preso por su activismo, y vive exiliado en París, junto a sus hijos gemelos, los cuales no ven a su madre desde hace algunos años.
Este premio, según el comité noruego, «también reconoce a los cientos de miles de personas que se han manifestado contra las políticas de discriminación y opresión del régimen teocrático contra las mujeres».
