Mercado sustentable libre de envases

Recientemente, en la Argentina se inauguró el primer mercado sustentable en el cual podés realizar tus compras habituales de almacén con tus propios envases. Se trata de Cero Market, que se encuentra ubicado en el barrio de Belgrano, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Monroe 2468).

Es una gran novedad en nuestro país, ya que no se contaba con un negocio de este tipo y que, además, incentiva como consumidores a ser más responsables de aquellos productos que compramos, y ser conscientes de la cantidad de plástico y de desechos -en algunos casos contaminantes- en los que viene empaquetada nuestra comida como lo son bolsas, papeles, plásticos, vidrios y bandejas, que podemos evitar y así contribuir con el reciclado y el cuidado del medio ambiente.

Para conocer más al respecto, entrevisté a Ana Pierre, cofundadora de Cero Market, quien nos contó que la idea «surgió desde mi necesidad particular, realmente me resultaba muy difícil y costoso comprar sin envases y cantidades mínimas. Mucho tiempo, esfuerzo, dinero y, así y todo, no conseguía ni la mitad de las cosas que consumía en mi casa. Desde ese lugar, empezamos a gestar la idea de un supermercado libre de envases y cantidades mínimas. El propósito era básicamente simplificar -en muchos casos, incluso hacer posible lo hasta ahora imposible-, abaratar y hacer más segura la compra a granel y fraccionada”.

La opción de comprar a granel es beneficiosa porque los costos son menores que en otros mercados pero, como cuenta Ana, resulta difícil como consumidor poder conservar los alimentos en las condiciones óptimas.

Para llevar adelante el proyecto en Buenos Aires, realizaron una investigación exhaustiva, tal como lo recuerda: “El paso a paso fue trabajoso. Empezamos por detectar la necesidad y, una vez comprobado que no había nada así, nos lanzamos a investigar el mercado internacional. Encontramos que había tiendas de este tipo en Europa y Oceanía. Nos lanzamos a Europa -Inglaterra, Francia e Italia- a investigar las particularidades y procesos de este modo de comerciar. Ahí me entrevisté con referentes, que fueron muy generosos en brindarnos información. Una vez de regreso en Argentina, empezamos a diseñar el local y todo lo que habría en él”.

Además querían que incluso los contenedores donde se depositen los productos fueran de industria nacional, por ello “nos lanzamos a buscar diseñadores, artesanos, matriceros, industriales, etcétera. Fue trabajoso pero valió la pena. Con todo en marcha, quedaba buscar los proveedores, ponernos de acuerdo en nuestro modo de venta, pero también era necesario que acordáramos modos de entrega por parte de ellos. Muchos meses más tarde tuvimos todo listo, con un catálogo que cubría todo lo que habíamos soñado”.

En Cero Market podemos encontrar todos los productos y categorías que se pueden hallar en un supermercado tradicional, a excepción de los alimentos frescos. Se encuentran harinas, arroces, aceites, frutos secos, vinagres, productos de limpieza, de cosmética,  condimentos, fideos, pan, té, café y alimento para mascotas, entre otros.

“Una nueva forma de comprar”

Los recipientes que se pueden utilizar para realizar las compras puede ser casi cualquier objeto, por ejemplo, bolsas de plástico o tela, tuppers, frascos, recipientes de telgopor, lo que se tenga en la casa, en el comercio cuentan con envases a la venta. Pero lo importante “es reutilizar, no descartar nada (incluidas las bolsas de plástico)”, nos asegura la propietaria del mercado.

La forma de compra es muy práctica: “Cuando llegan a Cero se pesan los recipientes y se anota el peso en cada uno. Luego las personas se van sirviendo lo que necesitan comprar y se va anotando en cada recipiente (con nuestra ayuda y materiales) los códigos de los productos seleccionados. Posteriormente se pasa por caja, donde se pesa cada producto y (previo descuento del peso del envase) se cobra”.

Otra de las características positivas de este emprendimiento es que la tienda no cuenta con cantidades mínimas de compra, por lo tanto, el consumidor puede comprar la cantidad de  producto que requiera  y en el envase que quiera llevarse su producto.

La tienda ya se encuentra funcionando al público y la respuesta de los clientes es increíble. Desbordó las expectativas de los propietarios. Al respecto, Ana Pierre nos contó que “desde el primer día el local estuvo a capacidad plena. Con gente de todas las edades, no solamente jóvenes, como imaginábamos. Y el 90% se acercó a Cero con sus envases para rellenar”.

Sin lugar a dudas, de a poco los consumidores estamos aprendiendo a cómo cuidar el medio ambiente, la importancia que tienen estos pequeños cambios que podemos realizar desde nuestro lugar y ahora, con la inclusión de este tipo de mercados, es posible la opción de una compra sustentable.