El pasado miércoles 17 de enero se llevó adelante un nuevo plenario de comisiones en la Cámara de Diputados de la Nación. Terminó la exposición de organizaciones no gubernamentales como representantes de diversos sectores de la sociedad en relación al proyecto de ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos. Compartimos un resumen de las intervenciones referidas a la cultura.
Alfredo Vaga Lamenti, por el Instituto Nacional del Teatro, dijo que «el teatro es vehículo de desarrollo humano» y luego agregó que «nuestro sector está conmocionado en este estado de estupor, no terminamos de elaborar por qué se plantea la derogación de esta herramienta virtuosa. Una ley ejemplar admirada en el mundo entero que garantiza fomento y la distribución equitativa de recursos en cada rincón del país y una organización desburocratizada que produce debate, intercambio, evitando toda discrecionalidad en la asignación de recursos».
Lucrecia Martel participó de manera virtual y agregó algunos aspectos clave para entender que el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) es más que una entidad que otorga subsidios: «Nuestra industria es básicamente de pequeñas y medianas empresas y entre el 70% y 90% del costo de presupuesto de una película argentina se financia exportando derechos, es decir, compitiendo en fondos internacionales con películas de todo el mundo. Los países con los que trabajamos con mayor frecuencia son Brasil, España, Colombia, Francia, Estados Unidos, Canadá, Inglaterra y, últimamente, China, Qatar y Corea del Sur. Y por supuesto de inversores privados.
Es decir que nuestra industria de pequeñas y medianas empresas genera un gran ingreso de divisas extranjeras al país. Lo que permitió el desarrollo de nuestra industria es una ley de cine que nos costó muchísimo tener y que rige el funcionamiento de un organismo fundamental para nuestra actividad que es el INCAA. En mi carrera he conocido el INCAA de Menem, de De la Rúa, de Néstor Kirchner, de Cristina Fernández de Kirchner dos veces, de Mauricio Macri, de Alberto Fernández… de todas esas gestiones puedo hacerle listas de críticas y hechos indignantes que han sucedido en el INCAA, pero jamás podrían nuestras empresas de cine haber salido a buscar fondos internacionales sin su existencia que organiza gestiones internacionales, cuestiones bilaterales, que permite ordenar nuestra actividad.»
Por la Cámara del Libro expuso Juan Manuel Pampín: «El establecimiento de un precio único para cada libro que se publica en nuestro país ubica a todas las librerías cualquiera sea su tamaño, en situación de igualdad, permitiendo la competencia y la coexistencia».
Federica Baeza, doctora en Historia y Teoría de las Artes y docente de la Universidad Nacional de las Artes sostuvo que «no queda claro lo que el Ejecutivo quiere justificar, porque cuando dice que las va a cerrar -se refiere a los institutos culturales mencionados antes- o que las va a reabsorber como programas específicos bajo la Secretaría que tiene a su órbita, ¿qué significa? ¿Se va a apropiar del dominio público pagante o del 10% de recursos que genera el ENACOM o los va a disolver y entonces va a realizar estos programas específicos bajo aportes del Tesoro Nacional?», y agregó que «la justificación fiscalista lo que esconde en realidad es la intención de desplazar estas políticas a ámbitos poco transparentes y no democráticos».
Mariela Domínguez habló por Teatro Autoconvocado de San Luis y apuntó a los legisladores y legisladoras: «¿Alguno de ustedes tuvo la experiencia de ver la emoción de un niño, una niña o cualquier adulto al espectar una obra de teatro o una función de cine, un concierto en vivo o una obra original por primera vez? Si no lo hicieron se los recomiendo, porque es ahí en ese encuentro efímero que está el sentido de nuestro trabajo».
Por último, el coordinador general de la Multisectorial por el Trabajo, la Ficción y la Industria Audiovisual Nacional, Guillermo Tello, intervino para pedirle a los diputados y diputadas «reflexiones sobre el daño que seguramente le hará esta ley a la cultura toda».
