El primer fin de semana de marzo trajo consigo nuevos aumentos. En este caso, se trata del precio de los combustibles, que tuvo una actualización del 7,5% promedio a partir del sábado como consecuencia de la variación impositiva que impuso el Gobierno Nacional en el sector, sumada al incremento de los márgenes de rentabilidad que dispusieron las petroleras.
De esta manera, casi la totalidad del mercado (95% de este lo abarcan Axion, Puma, Shell e YPF, las compañías que ajustaron sus tarifas) estableció valores de referencia en 800 pesos para la nafta súper, 987 pesos para premium, 914 para diesel ultra y 1.073 pesos para diesel premium.
Al respecto de la caída en las ventas, en enero se vendió 25% de productos premium en relación al último mes de 2023. Además, la comercialización interanual para el primer mes del año decayó 5,7% (1.466.484 metros cúbicos frente a 1.556.128), según informó la Secretaría de Energía. Asimismo, el consumo de gasoil se contrajo 3,8% interanual y las variedades premium bajaron 7,5%. El caso contrario se dio en la nafta súper, que mejoró 0,13% debido al ajuste en el consumo (la decisión de compra se vio afectada por la pérdida de poder adquisitivo y se pasó de combustibles de mayor calidad a priorizar precios más accesibles).
Finalmente, cabe destacar que la inflación en el sector desde el mes de diciembre y hasta el inicio del mes de marzo se ubica en torno al 95%, y este aumento es el primero de los cronometrados para 2024, ya que en el mes de junio volverán a actualizarse según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del primer trimestre del año, que publica regularmente el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
