Actividad física, placer y ejercicios sin excusas

Sabemos que la actividad física presenta innumerables beneficios para nuestra salud y, sin embargo, a la hora de ponernos en movimiento no lo hacemos o lo posponemos para otro día, convirtiéndose en una promesa a cumplir.
Incorporar hábitos nuevos en nuestra vida no suele ser nada fácil y, como primer paso, necesitamos organizarnos y planificar de qué forma vamos a hacerlo. Es decir, definir el cómo, cuándo y dónde y fijar objetivos a corto plazo que sean realistas, medibles, específicos, relevantes y delimitados por períodos de tiempo. Lo que quiero decir es que todo aquello que nos proponemos tiene que estar alineado e integrado a nuestra vida y posibilidades, de lo contrario, solo lograremos frustrarnos.
Una de las variables más importantes a considerar es que ese momento de actividad física tiene que representar un tiempo de disfrute y diversión, ya que será lo que nos motive para mantenerlo en el tiempo. No tiene sentido obligarnos a pasarla mal por realizar una actividad que nos aburre, tenemos que encontrar la que mejor se adapte a nosotros.

¿Cómo empezar?

El inicio tiene que ser gradual, con la finalidad de evitar fuertes dolores musculares y lesiones innecesarias. Nuestro cuerpo se tiene que adaptar a este cambio y la mejor forma de hacerlo es paulatinamente.
Para los que tienen poco tiempo, algunas ideas para comenzar a incorporar la actividad física son: usar las escaleras en lugar del ascensor, bajarse del colectivo algunas paradas antes y caminar hasta llegar a destino, hacer pausas de al menos 10 minutos cada 2 horas durante la jornada laboral para pararse y mantenerse activo, realizar una caminata durante la hora del almuerzo, elegir circuitos en tu barrio y alrededores para salir a trotar y usar la bici para los trayectos en los que tomaríamos el colectivo.
Otro punto a destacar es que no solo es importante el tiempo que destinamos a estar activos sino también el que pasamos en forma sedentaria, frente a la computadora, el televisor y los videojuegos. Es imprescindible que evites pasar horas sin movilidad, hacé cortes y ponete en acción.

Beneficios

Los mismos se agrupan en 4 áreas: 1-Adaptaciones psico-neuro-biológicas (mejora de la autoestima, incremento de las relaciones sociales, mayor tolerancia a los esfuerzos, mejora en las sensaciones de bienestar y humor y mejora la imagen y el esquema corporal), 2-Adaptaciones progresivas músculo-osteo-articulares: aumento de masa magra y disminución de la masa grasa, 3-Aumento de la capacidad cardiocirculatoria, respiratoria y metabólica teniendo en cuenta el tiempo y la intensidad de trabajo y 4-Incremento de colesterol HDL (beneficioso), disminución de colesterol LDL (perjudicial), disminución de triglicéridos, mejora del consumo periférico de glucosa y disminución de la concentración de insulina en sangre.

Recomendaciones

Para la prevención de sobrepeso se recomienda un mínimo de 30 minutos de actividad física al menos 5 veces por semana y, de ser posible, todos los días a intensidad moderada. La misma puede realizarse de manera continua, intermitente y/o acumulada. Para personas mayores a los 65 años la recomendación se reduce a 3 veces semanales, incluyendo a la rutina ejercicios con pesos moderados y ejercicios de equilibrio.
Y, por último, no olvides realizarte un chequeo con tu médico clínico previo a comenzar una actividad física o deporte, es indispensable para gozar de los beneficios del ejercicio, con la seguridad de que sea una pauta terapéutica y no una contra indicación.