Lucha contra el cáncer de mama

Por iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 19 de octubre se celebra mundialmente el Día Internacional de la Lucha Contra el Cáncer de Mama, con el objetivo de generar conciencia y promover que cada vez más mujeres puedan acceder a controles, diagnósticos y tratamientos.

Este día se conmemora a causa de todos los casos que se presentaron en el mundo y que terminaron con la vida de muchas mujeres. En múltiples casos, la poca información sobre esta enfermedad o incluso no contar los tratamientos adecuados llevaron a esta situación.

Según la Organización Panamericana de la Salud, «en la Región de las Américas, el cáncer de mama es el más común en mujeres y la segunda causa principal de muerte por cáncer de mujeres. Se estima que 408.000 mujeres fueron diagnosticadas y más de 92.000 murieron por cáncer en mama en 2022. Se estima que, si se mantienen las tendencias actuales, para 2030 aumentará en un 46% en la región».

¿Qué es el cáncer de mama?

De acuerdo con el Ministerio de Salud de la Nación, el cáncer de mama es una enfermedad causada por la multiplicación anormal de las células de la mama que forman un tumor, afectando a cualquier mujer. La posibilidad de que aparezca aumenta con la edad, especialmente luego de los 50 años.

La detección del cáncer de mama se realiza mediante una mamografía, se puede detectar cuando el nódulo todavía no es palpable o lo es mínimamente. En estos casos, según el Ministerio, es posible llevar adelante tratamientos menos agresivos que los que se realizan cuando el cáncer está más avanzado. Por eso los especialistas aconsejan el control de las mamas cada dos años en mujeres mayores de 50 años y la charla a partir de los 40 con su ginecólogo para establecer los controles necesarios.

También se recomienda que, al momento de hallar un nódulo o una dureza en la mama, se asista rápidamente al ginecólogo de confianza. De esta manera, se estará asegurando una detención temprana y el control de la enfermedad.

Si bien el cáncer de mama difícilmente se pueda prevenir, es posible tomar medidas que disminuyan los factores de riesgo y la probabilidad de aparición de la enfermedad.

Algunos hábitos saludables que aconseja el Ministerio de Salud son la adherencia a estilos de vida saludables, como lo son el ejercicio físico aeróbico (ejemplo, caminar durante 50 minutos al menos 3 veces por semana), no fumar, realizar una dieta baja en contenido graso y con alto consumo de frutas y vegetales, moderar la ingesta de alcohol y mantener el peso dentro de los límites normales.