Para algunas personas, hablar de sexualidad en personas con discapacidades todavía es un tabú. Según los cálculos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), existen más de 500 millones de personas con algún tipo de discapacidad. Sin embargo, son muchos los malos entendidos y prejuicios acerca de este tema, por lo que es recomendable informarse un poco más y conocer acerca de esta población.
Estas son algunas de las cosas que quizás no sabías sobre la sexualidad en personas con discapacidad.
Las personas con discapacidades se interesan por la sexualidad
Para nadie es un secreto que el erotismo y la sexualidad forman parte de un impulso vital, además, se considera que es esencial para el desarrollo y la salud, y son también reconocidos como vías de comunicación entre seres humanos.
Aun así, en el caso de la sexualidad en personas con discapacidad, son muchas las limitaciones que la sociedad o familiares podrían colocarles, por falta de información o por considerar que no presentan interés por la intimidad.
Además, se cree que todas las personas con discapacidad serán niños o niñas toda la vida pero, por el contrario, aun cuando algunas áreas del desarrollo se ven comprometidas por cada condición, la sexualidad sigue siendo un área diferente, presente en todos los seres humanos.
Por otra parte, se deja de lado que el erotismo es un modo de ponerse en contacto con otros, experimentando sensaciones corporales, que se percibe sexualmente más allá de los genitales. La sexualidad en las personas con discapacidad no es un factor aislado, ya que se interesan por tener citas, casarse e, incluso, se sienten atraídos por aspectos físicos del sexo.
Las personas con discapacidad también son deseadas
Personas sin discapacidad pueden llevar una relación con otra que sí presente alguna condición diferente, sin ningún problema para relacionarse.
Además, son muchos los paradigmas sociales que se rompen ya que, en este caso, la pareja se conecta por aspectos profundos en su ser, deseos, sentimientos e intereses, por lo que cualquier barrera desaparece, lo que resulta beneficioso para ambos.
Pueden experimentar satisfacción sexual y tener hijos
Este aspecto de la sexualidad en personas con discapacidad va a depender del nivel de la lesión que padezca la persona, ya que algunos podrían experimentar dificultades de erección y eyaculación, también podrían presentarse disminución en la movilidad del esperma, causando infertilidad.
Cabe destacar que todos estos posibles inconvenientes se presentan relacionados con la discapacidad de la persona. Además, pueden aplicarse terapias que incluyen estimulación y uso de medicamentos.
En el caso de las mujeres con discapacidades, si existiera una lesión grave, puede retener el impulso del orgasmo. También, en algunos casos, pueden perder la capacidad de satisfacción, sin embargo, pueden concebir hijos sin problema alguno.
Por otra parte, las personas con Síndrome de Down son quienes más expresan su interés por casarse y tener hijos, cosa que es totalmente posible, si se les brinda la orientación y apoyo adecuados.
Quiero abrir un apartado para ofrecer una vía de información y formación muy importantes a tener en cuenta. Existe una Asociación sobre Síndrome de Down de la República Argentina llamada ASDRA, ubicada en la calle Uriarte 2.011, en la Ciudad de Buenos Aires.
Esta ofrece servicios de salud, promoción de derechos, educación, asesoramiento y una agenda que brinda encuentros virtuales para el conocimiento de la dinámica doméstica a los padres que tienen hijos con Síndrome de Down desde el nacimiento hasta el tiempo en que el hijo forma su propia familia.
Derechos sexuales y derechos reproductivos
La Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH) firmada en 1948 establece que los derechos son universales, indisociables e interdependientes. Esto significa que el derecho a vivir libremente la sexualidad implica el reconocimiento de la naturaleza humana de las personas y, en consecuencia, que está directamente relacionado a otros derechos fundamentales y universales como el derecho a la vida, a la salud, a la calidad de vida y a la libertad.
La sexualidad sigue siendo un tema sensible, dado que se refiere a aspectos de la intimidad de las personas, al mismo tiempo que se relaciona con cuestiones profundamente sociales. La salud sexual y la salud reproductiva refieren a las prácticas que se llevan a cabo para vivir una sexualidad plena con los cuidados, ajustes y adaptaciones que sean necesarios para cada persona, en cada situación de la vida. La salud sexual y la salud reproductiva de las personas con discapacidad (PCD) tienen una larga historia de invisibilización, desconocimiento y formas de hacer y de pensar sustentadas en prejuicios más que en criterios de salud.
La visibilización y el reconocimiento de los derechos sexuales y los derechos reproductivos de las PCD son fundamentales para hacer frente a la discriminación y a la histórica negación de estos derechos universales. Esta situación se basa en la presunción errada de la no sexualidad de las PCD, así como en la presunción de incapacidad para decidir sobre sus cuerpos, su salud y su vida sexual y reproductiva.
Algunas expresiones habituales que sostienen estos modelos son que las personas con discapacidades son “asexuadas”, son “infantiles” (desde una mirada paternalista sobre los niños), son «angelitos», son “dependientes”, “enfermas”, “improductivas”, “santas» o «malvadas”, “no pueden» o «no van a poder”. Estas miradas están atravesadas por perspectivas incapacitantes, paternalistas, sobreprotectoras, de sustitución de la voluntad.
Es muy importante que el tema sexual termine yendo al terreno íntimo y no al terreno prohibido. Vigilancia y protección no son compatibles con intimidad de la persona discapacitada. Vale aquí tener en cuenta cómo se preparan sus cuidadores para entender y generar espacio propicio de intimidad con la educación adecuada, allí está la protección, con la información y puesta en palabras.
Teniendo en cuenta que cualquier chica o chico sin discapacidad se busca su propia intimidad, en los chicos y chicas con discapacidad no es así.